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UNA FIESTA EN EL FÚTBOL DEL INTERIOR: EL CLÁSICO ENTRE TABARE Y PIRIAPOLIS

  • Eduardo Cabrera
  • 3 may 2017
  • 2 Min. de lectura

Fin de semana largo con un calendario generoso ubicando al 1º de mayo un día lunes, presentaba a la ciudad balnearia repleta de gente. Las circunstancias de un primer partido clásico histórico, por el Campeonato Nacional de Clubes, Copa B, propiciaban un marco espectacular. El estadio Francisco Piria de bote a bote, con más de 1000 personas esperaba reluciente la cita clásica. Dos equipos preparados para llegar lejos en el torneo, despertaban expectativa en la afición. Incorporaciones de renombre en ambas escuadras invitaban presagiar diversos resultados, gana tal o cual, harán tantos goles. Nada de eso, nosotros esperábamos lo sucedido, un partido de pierna fuerte, mucha marca, entrega, predominando la lucha por sobre el buen fútbol. En estas contiendas, a pesar de la ausencia del juego atildado, la emoción, el dramatismo, nunca falta a la cita, donde en esta oportunidad, se multiplico, resultando uno de los partidos más apasionantes de los últimos tiempos. Piriapolis encuentra la apertura a los 2 minutos, a través de Diego Ramos quien encuentra un rebote en el área, cacheteandola hacia la red sin dificultad. Paulatinamente Tabaré se fue al ataque para obtener la igualdad. A los 24 minutos una chance ideal para empatar tubo el elenco del Indio, cuando Diego González rematara la pena máxima, contenida por José "Chacho" Hernández. A los 37 minutos es expulsado "el zurdo" Martín Rodríguez, tras un forcejeo en el área, complicando la suerte de Piriapolis. En la etapa complementaria, Tabaré se fue con todo al ataque para llegar al empate, dando ingreso a Santiago Bello, una de sus grandes apuestas deportivas. Al minuto 22 precisamente Bello, ejecuta un penal, desviado magistralmente por el portero Hernández, a esa altura el héroe de la tarde. Un par de minutos mas tarde, el propio Bello obtiene la revancha, concretando la igualdad, con definición precisa en el área, contra el palo. En el minuto 30 expulsan a De Barros, quien comete penal, interceptando el balón con la mano, una vez ensayada una chilena por parte del delantero Adrián López. En la misma incidencia es expulsado Polenta en Piriapolis. El debutante Adrián López marra el penal, contenido por Ontaneda, ya pasando a ser el día del golero. Los minutos finales fueron de predominio de los locales, que quisieron con más ganas que fútbol, encontrando una férrea defensa visitante. Por si fuera poco, expulsan a Diego Ramos faltando 3 minutos más los descuentos, Piriapolis termina con 8 hombres defendiendo como leones el empate. Tabaré lucho hasta el final sin obtener la victoria. Encuentro dramático por su desarrollo, por sus alternativas. Las dos instituciones de Zona Oeste, demostraron, más allá de los aspectos colectivos que están para grandes cosas en la Copa B......


 
 
 

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