top of page

Bergara: Hay compañeros con diversos grados de desencanto. Hay que asumirlo, entender las fuentes y

  • M 24
  • 4 nov 2018
  • 5 Min. de lectura

Entrevistado en InterCambio el expresidente del Banco Central y precandidato presidencial del Frente Amplio (FA), Mario Bergara, habló sobre su decisión de lanzarse al ruedo electoral y analizó varios temas económicos y sociales relacionados al presente y el futuro del país.


Bergara explicó que la reunión que mantuvo hace apenas horas con la dirección del Movimiento de Participación Popular (MPP) fue “básicamente una instancia de intercambio sobre cuestiones programáticas”, realizada con “la excusa” del “documento” programático elaborado por ese sector y compartido con el FA hace pocas semanas. Sobre la orientación de su precandidatura y la relación de ésta con el futuro del FA y el país, el también exministro de Economía es partidario de “renovar la visión del mundo”, que “está cambiando de manera rápida y drástica en todas las dimensiones”, desde “la economía” hasta “la geopolítica” pasando por “lo institucional”, aspecto éste del cual “el triunfo de Bolsonaro” viene a ser como “la frutilla de la torta”, graficó. Esa indispensable “renovación de la visión del mundo (…) conduce a una renovación de la agenda” política y partidaria, consideró, y en esa perspectiva se inscribe su precandidatura, corolario de “una decisión meditada” que llevó “un tiempo largo”. “Estamos en un momento de renovación de FA”, que “es ahora” y comprende necesariamente una “renovación programática”, recalcó. Y es que en 2005 “había una agenda” de gobierno que al cabo de casi 15 años transcurridos durante 3 gobiernos frenteamplistas, “está casi implementada”, por lo que su renovación y readecuación a los nuevos desafíos de este mundo que cambió tanto desde entonces, debe hacerse “incluyendo la renovación del elenco de liderazgos”, explicó su visión. El conjunto de liderazgos principales con que el FA llegó a esta coyuntura (Danilo Astori, José Mujica y Tabaré Vázquez) “ha sido muy exitoso”, tanto que “nos ha dejado la vara muy alta” para pasar la posta a otra generación en la que Bergara se visualiza junto a otros compañeros de ruta. “Podemos ser parte de esa generación de relevos” y “también podemos representar un espacio de impronta seregnista” en ese proceso de recambio. Claro que “la nueva estructura de liderazgos no va a ser la réplica” de quienes comienzan a dejar espacios a los que irán asumiendo las conducciones. Éstos, “además”, deberán lidiar con la realidad de “que hay compañeros y compañeras con diversos grados de desencanto” por muy diferentes razones. “Hay que asumirlo, entender las fuentes del desencanto y ver qué respuestas tenemos” para revertirlo y superarlo, sintetizó. En este nuevo desafío y tarea política asumida por él a cabalidad, el economista parte de una convicción: “reivindicamos lo hecho” por el FA desde marzo de 2005, “con un componente autocrítico de elementos que no han avanzado a la velocidad esperada” pero con la seguridad de que “todos los indicadores muestran resultados positivos” en la evolución histórica. En cambio, “nos pesa más el hecho de que el mundo está cambiando de manera drástica”, al punto de que algunas “políticas públicas” tan buenas como exitosas implementadas en estos 14 años, “capaz que hay que revisarlas” en función de que “no podemos pensarlas con la cabeza de un mundo que ya no existe”, el de los últimos años ´90 y primeros 2000. Después abordó varios temas económicos, entre ellos el fiscal, acerca del cual aseveró que “hay que adecuar el resultado fiscal, reducir el déficit” ya que “uno no puede endeudarse toda la vida porque a la larga” los efectos “son peores”. Se trata de “ir reduciendo gradualmente” el desbalance en las cuentas públicas, logrando “una reducción moderada del déficit”. “No” se trata de “un ajuste fiscal”, como reclaman la oposición de derecha y algunos economistas, aclaró, recordando que “la sociedad uruguaya sabe lo que es un ajuste fiscal” tal como se hicieron en “1982, 1990 y 2002”, apuntó. “Hay que hacer una adecuación fiscal, y la vamos a hacer”, precisó. A continuación se refirió al capítulo tributario y evaluó que “si estamos hablando” de la necesidad de proceder a “una adecuación del orden de 800, 900 millones de dólares, no creo que haya márgenes para incrementar la carga tributaria como para que este sea un factor de adecuación fiscal”. “Uruguay tiene una carga tributaria importante”, puntualizó.

Después se refirió a la necesidad, vinculada a la anterior, de reducir el desbalance financiero del sistema de seguridad social. Bergara prosiguió la entrevista analizando diversos aspectos de la evolución mundial de la producción, el trabajo y también el comercio a influjo del desarrollo tecnológico. “La tecnología lo está atravesando todo” y con ello está “desafiando las políticas públicas”, caracterizó.

Estamos ante “tendencias inexorables” que generan un “impacto sobre el mundo del trabajo”, lo que configura “una nueva constelación de oportunidades y riesgos” que exige como tarea nacional indispensable “capacitar y recapacitar trabajadores”.

“Ahí hay un desafío” inmediato en el que “el sistema educativo tiene que enfocarse más”, o sea “en las capacidades de este nuevo mundo” en el que “todo pasa por el pensamiento computacional”, así como en las habilidades “socioemocionales” de niños y jóvenes que vivirán en un mundo cada vez más dinámico, cambiante y veloz, pronosticó.

En otro orden de la actualidad nacional, valoró que “naturalmente” la ciudadanía siente el tema seguridad como algo relevante para su vida y destacó que “en el Ministerio del Interior hubo una reforma que no dudo en calificar como estructural”. Esta reforma “ha llevado a mejorar la presencia policial y la percepción ciudadana” de la labor de la Policía, más allá de que también “naturalmente, está lejos de ser suficiente porque las modalidades del delito han cambiado” respecto a una década atrás.

Junto al abordaje social de esta problemática es necesario “reprimir el delito”, criterio históricamente complejo “para la izquierda” y en el que hasta hace pocos años “teníamos un desbalance” que favorecía lógicas delictivas. Sin embargo, “las últimas acciones del Ministerio del Interior y la Fiscalía” interviniendo “con acciones represivas concretas” y dejando claro que “hay cosas que no se toleran”, constituyen un trabajo que “va en la dirección correcta”.

De cara a la parada electoral del año que viene, Bergara valoró “sin duda” la validez de la hipótesis según la cual es plausible que el FA conquiste el cuarto gobierno consecutivo. “Hay que trabajar para tener mayorías parlamentarias (…) pero aun si no se llega, igual creo que el FA va a tener una votación que le va a permitir llegar al gobierno en el balotaje”, afirmó.

El precandidato habló también sobre la situación política planteada alrededor del ex Vicepresidente de la República Raúl Sendic y valoró que “el FA ha demorado decisiones en ese sentido” de sancionarlo si los organismos de la coalición-movimiento cuentan con elementos que determinan actuar de ese modo. “El FA no debería amparar como paraguas electoral a compañeros que hayan incurrido en faltas éticas”, resumió.


 
 
 

Comments


bottom of page